Uno de los más famosos paisajes de Bahia, es Morro de São Paulo que atrae a personas de todos los lugares del mundo, sea por su belleza encantadora o por su infraestructura acogedora y completa. Localizado en la Isla de Tinharé, en la Bahía de Camamu, archipiélago del río Tinharé, el Morro es una de las principales referencias de Bahía.
Playas de aguas claras y piscinas naturales hacen de esta región un verdadero espectáculo. Para quien gusta de bucear, este lugar es excelente: los arrecifes de coral en Garapuá son una opción insuperable. Por su parte, los practicantes de Trekking pueden visitar el área, paseando por las ruinas de una fortaleza construida a mediados de 1630 y subiendo al faro para tener una vista panorámica de todas las playas y rincones de la isla. En la noche, la agitación comienza en la villa, un lugar simple, con sólo dos calles principales, donde se encuentran las posadas y las tiendas. Luego de la puesta del sol, todos se encuentran en la calle Caminho da Praia, lugar de bares y restaurantes; después de la media noche, todos van para las fiestas, que varían mucho de lugar, pero que duran hasta el salir del sol.

Atracciones:

Playas:

Primeira Praia: Una bella ensenada, rodeada por muchas casas de veraneo. Como su propio nombre supone, es la que marca el inicio del malecón de este lugar, localizándose bien cerca a Villa do Morro. El paisaje es lindo, incluyendo un mar con aguas claras y calmas, excelente para el buceo. Desde un bello peñasco, bien cercano, es posible hacer descensos emocionantes de tirolesa.

Segunda Praia: Saliendo de Primeira Praia y subiendo por unas escaleras, el visitante se encuenta con uno de las más bellas tarjetas postales de Morro: Segunda Praia. Es en ella que se realizan los principales eventos locales, ya que está localizada bien cerca a la villa y cuenta con una buena infraestructura. Durante los días de verano, principalmente, las arenas son tomadas por los turistas, que disfrutan buenas barracas de playa y deliciosos baños en esta bella ensenada de aguas cristalinas. A la derecha de la playa, se encuentra una pequeña península con grandes piedras, que ofrecen una buena pesca con caña o de buceo. En otro punto, el surf también puede ser practicado.

Terceira Praia: Considerada un buen punto de buceo, esta ensenada de 800 metros de extensión es también uno de los lugares más buscados por los visitantes. Sus aguas son muy tranquilas y, durante la marea baja, aparecen varias piscinas naturales.
Con establecimientos bien equipados, especializados en culinaria típica, además de buenas posadas, el turista tendrá en este lindo lugar, un total confort para disfrutar de las bellezas de Morro de São Paulo.

Quarta Praia: Por la distancia a la que se encentra de la sede del Morro, esta playa es la preferida de los adeptos al naturismo, ya que en casi sus 10 Km. de extensión, son desiertos. El mar es excelente para tomar baños en todas las fases de la marea, aunque el buceo es practicado en mejores condiciones durante la marea alta. El bello paisaje local es caracterizado por la densa vegetación nativa, vastos coqueiros y un gran manglar localizado en su cara sur.

Praia do Encanto o Quinta Praia: En la paradisíaca Isla de Tinharé, área que comprende el famoso Morro de São Paulo, un lugar que viene conquistando la atención de muchos visitantes y el interés de algunos emprendimientos turísticos.
Por ser una de las más aisladas entre las seis existentes en el “Morro”, la Praia do Encanto tiene como su mayor exponente la armonía de su bello paisaje, que mezcla Mata Atlántica nativa, coqueirales, arenas bien finas y vastos manglares, prácticamente sin la presencia de casas u otras edificaciones. Su mar refleja el clima pintoresco del lugar, ya que sus aguas, en cualquier periodo de mareas, se presentan calmas y cristalinas, perfectas para baños relajantes en familia y para la práctica de deportes náuticos. Durante la marea baja surgen, además, extensos bancos de arena, lo que permite hacer largas caminatas mar adentro y disfrutar momentos de total deleite dentro de las lagunas que se forman, represando aguas bien templadas. Al lado de su vecina, la no menos encantadora Praia de Guarapuá, presenta un difícil acceso por la distancia que la separa de la sede del Morro de São Paulo. Para llegar a ella, se puede hacer el recorrido a pie u optar por un paseo de “besouro”, un pequeño tractor muy popular en la región.

Circuitos históricos:
Reducto de playas paradisíacas, Morro de São Paulo ofrece también circuitos históricos espectaculares. Fonte Grande, construido en 1746 para la captación y decantación de las aguas, fue escenario de acontecimientos memorables en la historia nacional, como la visita ilustre del Emperador D. Pedro I y de la Marquesa de Santos. La villa creció alrededor de este monumento y, en la actualidad, ofrece una estructura completa de posadas y restaurantes, con el privilegio de poder oírse el correr de las aguas de camino a las playas, del otro lado de la isla. El Faro do Morro, que data de 1855, es también parte del conjunto de monumentos históricos. En las proximidades, un mirador se esconde en medio de la vegetación tropical abre una vista panorámica de la isla en toda su plenitud. Es uno de los mejores puntos para entenderse las curvas y mareas de la región. Cuenta la leyenda que el monumento fue unos de los más grandes registros en las anotaciones del diario de D. Pedro II, que describe al Faro durante la visita de la Familia Real a la isla, en 1859. En Ruinas da Fortaleza, la vista es igualmente embriagadora. Al final de la tarde, con la puesta del sol, los delfines les dan un aire de gracia al mar de aguas cristalinas. La Iglesia de Nossa Sra. da Luz, en la plaza del mismo nombre, data de 1845. En su interior, podemos observar reliquias de los Siglos XVII y XVIII, como las imágenes sacras y los altares de cedro en estilo barroco.